Los puentes peatonales del río son más que estructuras funcionales que conectan dos puntos en un cuerpo de agua. Son maravillas arquitectónicas que combinan la forma y la función, creando puntos de referencia icónicos que mejoran el paisaje urbano y proporcionan experiencias únicas para aquellos que los atraviesan. Estos Brdges sirven como vínculos vitales en la infraestructura de una ciudad, promoviendo la movilidad peatonal, alentando el transporte activo y fomentando un sentido de comunidad.